Los resultados económicos positivos, la aprobación del referéndum sobre el Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana (TLC) y la caída en la pobreza son los principales hechos que marcaron el 2007 como sobresaliente para la economía costarricense. Alto crecimiento de la producción, fuerte llegada de inversión extranjera, alto dinamismo de las exportaciones, reducción de 3,5 por ciento en la incidencia de pobreza, un saldo positivo en las finanzas públicas y un aumento en las reservas internacionales, son algunos de los indicadores que apuntalan este desempeño positivo de la economía. Pareciera que los únicos lunares en este escenario positivo son la inflación, que superó el 10 por ciento anual, y la incertidumbre existente en el sistema cambiario, ante los cambios en el régimen.
Estos buenos resultados económicos forman parte de una tendencia de los últimos años y están sumamente ligados con el flujo positivo de inversión extranjera que ha ingresado al país. Dicha inversión ha impulsado fuertemente el crecimiento del sector industrial-exportador, del turismo, de la industria de alta tecnología y de servicios médicos, y la venta al exterior de servicios. Recientemente, el auge del sector inmobiliario, especialmente en la zona costera norte del país, está muy ligado al ingreso de la inversión extranjera. Por la importancia apuntada del aporte de la inversión extranjera, y dado que su relevancia puede ser aún mayor durante la implementación del TLC, es que la Academia de Centroamérica ha querido centrar este Libro Anual en dicho tema.