Durante casi medio siglo, quien escribe estas líneas ha participado activamente en la política económica del país. Con base en esta experiencia, quizás sea propicio el momento para compartir algunos puntos considerados importantes por el autor, que bien podrían retenerse o ser tema de debate y discusión. También de referirse a varios desafíos que el policy maker debe enfrentar, así como a las múltiples encrucijadas ante las cuales él debe, cada día, tomar decisiones y actuar.
Las reflexiones se han resumido en quince puntos principales. Como sucede frecuentemente con planteamientos de esta naturaleza, la manera cómo se aborda cada tema resulta necesariamente insatisfactoria. De hecho, surgen más preguntas que respuestas. Los claroscuros y las áreas grises están presentes, una y otra vez. Algunos puntos requieren ser más elaborados por falta de una explicación adecuada. Otros se quedan en el tintero. Con frecuencia se insiste en lo obvio y se cae en lo risible. Todo ello es conocido y, hasta cierto punto, inevitable. Sin duda, cada experiencia es única.