Tras la crisis económica a principios de la década de los ochentas, Costa Rica inició un proceso de revisión de su estrategia de desarrollo con el fin de mejorar sus oportnidades de crecimiento en el largo plazo. La liberalización comerciall (reducción de barreras arancelarias y no arancelarias a las importaciones) y la promoción de las exportaciones (disminución de impouestos, otorgamiento de subsidios y otras medidad tendientes a fomentar un régimen comercial más favorable a las ventas al exterior) han estado entes los componentes más importantes de la nueva estrategia de inserción en la economía internacional.